Chiapas y la industria refresquera

México está pasando por una crisis hídrica muy significativa y sus principales causas son la contaminación de los cuerpos de agua (superficiales y subterráneos), además de la sobreexplotación. Si bien muchas actividades usan este vital recurso de manera directa en enormes cantidades, como es el caso de la agricultura y la industria, la mayoría del tiempo son gastos hídricos necesarios para el bienestar y supervivencia de la población.

Sin embargo, existe una parte del sector industrial que está haciendo grandes saqueos de cuerpos de agua y, por ende, afectaciones a la salud de las personas: la industria refresquera.

El gobierno de México ha brindado múltiples concesiones sobre acuíferos a la industria refresquera, es así como estas empresas pueden explotar libremente estos puntos de abastecimiento; por desgracia, en muchos casos eso representa una disminución en la disponibilidad de agua para las poblaciones cercanas. Actualmente, el estado que se destaca por esta problemática de monopolización natural es Chiapas, en especial el municipio de San Cristóbal de las Casas.

Industria Refresquera

En todo el planeta existe un consumo de bebidas embotelladas, especialmente  refrescos de cola; sin embargo, el municipio de San Cristóbal de las Casas consume este tipo de refrescos de manera constante, aproximadamente 8 veces más del promedio nacional, lo cual se ha fomentado dentro de la población al tener la principal embotelladora perteneciente a una de las mayores multinacionales que producen refrescos de cola, ya que Chiapas tiene una gran riqueza hídrica. 

Siendo parte del sureste de México, Chiapas cuenta con el 68% de las escorrentías presentes en el territorio nacional, también tiene un volumen de precipitación promedio mayor al resto de la República, este tipo de empresas dependen completamente de la extracción de agua, sin ella no podrían mantener su nivel de producción. Esto ha generado una paradoja que solo puede estar al límite de lo absurdo: mientras esta empresa extranjera puede extraer hasta 1,3 millones de litros de agua al día, la población apenas y puede cubrir sus necesidades básicas en general, ya que a veces el agua no alcanza. 

Debido a todo esto, los habitantes de este municipio han optado por aumentar su consumo de refresco de cola y al tener la empresa matriz tan cerca, el precio de estas bebidas es menor que en el resto del país, facilitando el acceso. Ahora, este refresco se encuentra en todos los ámbitos de la vida de la población, es imprescindible durante las comidas y en las jornadas laborales, incluso ha logrado desplazar parte de la riqueza cultural del lugar. Antes de la llegada de esta marca, el POX, una bebida alcohólica tradicional, era de gran valor ceremonial, sin embargo, hoy en día se ha visto desplazada por el refresco de la embotelladora.

Los daños causados son enormes: la sobreexplotación de los acuíferos, la degradación cultural y los daños a la salud. Muchos de los pobladores comentan que la llegada de la carretera aumentó los casos de enfermedades como diabetes e hipertensión, pero la realidad es que fue la llegada de esta empresa, el consumo excesivo de su producto y la ausencia de políticas que regulen el consumo de este tipo de productos.

Una vez más nos encontramos con la realidad del sistema económico que rige nuestra vida en la actualidad, siempre es más valioso el crecimiento económico que el bienestar del medio ambiente y la población.

Escrito por Biol. Andrea Vera Asesora Ambiental en Grupo PROMESA.


Fuentes: